Que los ricos y poderosos nos roban, de muy distintas y variadas formas, parece que cada día lo tenemos más claros. Algo a lo que ha ayudado la reciente filtración de los papeles de Panamá, que debemos recordar: pertenecen a un solo paraíso fiscal y a un solo bufete de abogados. Así que imaginemos lo que hay escondido en todos los bufetes de abogados de ese país que se dedican a lo mismo, y en todos los paraísos fiscales que cobijan los gobiernos.
Pero algo que también está en boca de todos los españoles durante estas semanas, es la sentencia del Tribunal Supremo que dictaminó, que los intereses de demora de los préstamos personales son abusivos. Algo que ya podía adivinarse cuando uno iba a leer la letra pequeña y se encontraba con tipos de interés del 25 o 30%.
En España uno puede ir a pedir un crédito de 2000 euros en una financiera, y en poco tiempo perder su casa. Y no sería el primer caso que desgraciadamente hemos podido ver en las noticias de nuestro país, donde mucha gente se ha visto desahuciada de su hogar por contraer una deuda, que provenía de préstamos realmente pequeños, pero que se han ido incrementando de forma desmesurada, por unas leyes que dan apoyo a la usura.
Pero parece que por fin se empieza a hacer algo de justicia, y se ganan sentencias tanto con las cláusulas suelo como con los intereses abusivos, con los que se han estado lucrando durante demasiados años. Actualmente se han declarado ilegales los intereses de demora que superen en dos puntos a los intereses del préstamo.
Como ejemplo de malas prácticas y para quien va dirigida esta sentencia, encontramos al Banco Santander. Quienes incorporaban a sus préstamos personales, un tipo de interés de demora del 21,8%, mientras que un interés normal de cualquier préstamo personal, estaría situado en la horquilla del 6 y 9%. Así que puede decirse que más que duplicaban esos tipos de interés, complicando la vida a muchos de sus clientes que por problemas financieros no pudiesen hacerse cargo de alguna de las cuotas.
Gracias al caso del Santander y a la denuncia y el esfuerzo de uno de sus clientes, que se decidió a denunciar a este gigante. Se ha creado jurisprudencia, que dictamina que es ilegal que en los préstamos sin garantía real, puedan fijarse intereses de demora que incrementen en más de dos puntos porcentuales, el interés del préstamo.
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